Para la psicología existen una serie de factores que conforman al sujeto y lo diferencian del otro, estos factores (que van desde el temperamento y la personalidad hasta las experiencias que se tienen en la infancia temprana y las relaciones de apego temprano) inciden directamente en la manera en la que se concibe, interpreta y relaciona con el mundo. Así pues, se puede afirmar que la psicología tiene como base el hecho de que existen una serie de factores (de carácter personal y de carácter social) que facilitan el hecho de que un sujeto se comporte de determinada manera en un contexto y en un momento específico. Para la psicología ambiental esta afirmación implica que hay una serie de variables (o factores) lo que facilitan que las personas se comporten de manera que puedan contribuir a la conservación del ambiente.
Gifford (2014), elaboró una lista con una serie de variables que, según él, son las que suelen incidir en mayor medida en la conducta pro-ambiental de los sujetos, las dividió en variables de índole social, variables de índole personal y honeybees.
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Dentro de los factores personales Gifford resaltó la personalidad, el género, la edad, los conocimientos en el área de la ciencia y educación, las experiencias tempranas, los valores de las personas, la responsabilidad Percibida por las acciones y el apego al lugar. Así pues, se puede afirmar que la relación entre estas variables sirve para predecir la conducta pro-ambiental. Por otra parte, en lo relacionado con las variables sociales, el autor resalta la religión, la naturaleza del ambiente (Urbano vs Rural), las normas o reglas del lugar, la clase social
Por último, el autor se refiere a honeybees como una serie de variables que varía dependiendo del contexto y que hacen que las personas colaboren con el cuidado ambiental pero que su meta con la conducta no es esta, es decir, colaboran indirectamente con el cuidado ambiental (gastar menos agua para ahorrar dinero, comprar productos orgánicos porque les es más barato, etc.). Así pues, el que se de o no el comportamiento ambiental en los individuos puede ser explicado desde la interacción de diversos factores personales en conjunto con complejidades contextuales, culturales y sociales.
Bibliografía:
Gifford, R., & Nilsson, A. (2014). Personal and social factors that influence pro‐ environmental concern and behaviour: A review. International Journal of Psychology, 49(3), 141-157.
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